Tratamiento con infiltración y crioterapia: El camino de Fran

¡Hola! ¿Cómo están? Espero que se encuentren muy muy bien disfrutando de las vacaciones y el verano.

Por aquí me reporto luego de harto tiempo (UPS)… Hemos tenido tantos cambios que el tiempo se me hace muy corto. Aun así, siento que tengo un montón de cosas que contarles. Cada día hay más historias que me han enviado y que ansían ser subidas en este espacio.

PD: Aunque no he podido estar tan presente en el blog, en Instagram estoy siempre MUY activa, te espero allá 🙂

El tratamiento de Fran

Antes, un poco de contexto

Hace algún tiempo comencé a hablar con una persona con respecto a su tratamiento. Cada vez que subía información sobre crioterapia, ella me contaba cómo iba avanzando.

Antes de comenzar, quiero puntualizar que el tratamiento se realizó en el sistema público de salud (en Chile). Por lo general los casos que compartimos se realizan en clínicas privadas, debido a que a través del sistema público es más complejo acceder a un tratamiento (al menos en este país). Desde el consultorio público, ella fue derivada directamente al Hospital San José (ubicado en Santiago de Chile).

Muy buenas tardes ❤️ yo hace un año me hago tratamiento de dos queloides con un doctor en el hospital San José, no sé mas información sobre si trabaja particular o algo, pero él me hizo cirugía en la orejita y llevo un año sin queloide ahí. El del brazo solo optó por infiltraciones con diferentes medicamentos y crioterapia, vamos super bien 💕 Es súper doloroso, pero vale la pena ver los resultados ❤️ cuando pueda te envío fotos de todo el proceso. Su nombre es Leonardo Peruihl , dermatólogo seco 💕

Vía mensaje directo

(…) Lo que me pasó fue por peste cristal, y me dio de grande, como a los 12 años. Yo no sabía que era y fue una ampolla de agua muy pequeña en el brazo que de tanto que picó me maltraté mucho. Te contaré esa historia cuando tenga fotos del resultado de mi última infiltración (ahora tengo la ampolla de la crioterapia) que ya terminé 🙊🙊🙊🙊 para que subas fotos completas de todo el proceso 💕

Vía mensaje directo

Esta persona fue contándome sus vivencias poco a poco, a medida que me enviaba fotografías del procedimiento. A continuación, con su autorización, quiero que lean de sus propias palabras la historia de su tratamiento.

El comienzo de todo

¡Hola Isi! Te cuento aquí detalladamente mi historia y proceso del tratamiento de mi queloide.

A los 12 años, tuve la peste cristal, y una de las lesiones se complicó en la recuperación. Al cicatrizar, quedó una marca levantada con forma de pelotita que quisimos tratar de inmediato ya que picaba y molestaba mucho. El dermatólogo identificó rápidamente que era un queloide, pero al estar pequeña solo me recomendó presionarlo ya que en ese entonces el único tratamiento que podía hacerme era infiltración con corticoides y nos advirtió que era muy doloroso (la mayoría de nosotr@s ya lo sabe).

Por vergüenza, siempre cubrí mi queloide. Además, por estar ubicado en el lateral de mi brazo, justo donde lo doblo, constantemente lo aplasté. Con el tiempo, este queloide en forma de pelotita se alargó, yo creo que por la ubicación y por el estiramiento de mi piel al crecer. Me resigné a vivir con él. Además, su forma también cambió y comenzó a parecer una «quemadura».

El tratamiento

Cuando tenía 25 años (en el 2021), fui a un dermatólogo del consultorio porque me apareció otro queloide en la oreja. Se generó por un piercing hecho con pistola (¡gran error!) y reaccionó 10 años tardío. El queloide se había vuelto molesto, picaba, dolía y cada día era mucho más grande. Yo tenía una idea de lo que me podrían hacer; tratamiento de corticoides, con todo el dolor que conlleva. De todas maneras, pensé en que ya estaba grande y podría soportarlo.

El doctor me infiltró 2 veces cada 15 días. En resultados, disminuyó un 3% el queloide del brazo y el de la oreja nada. Fue entonces que me derivó con otro dermatólogo.

El otro dermatólogo decidió extirpar el queloide de mi oreja (por el tamaño), y hace tratamiento de corticoides por 6 meses aproximadamente para el de mi brazo (sin cirugía).

La cirugía de la oreja salió bien. ¡El rebrote de ese queloide se ha controlado hasta el día de hoy!

Por otro lado, con el del brazo, al ser más antiguo, pasamos de infiltración de corticoides a infiltración de 5-FU, un antimetabolito bastante fuerte que usamos con anestesia local por otros 6 meses más. Esto me hacia ampolla en todo el queloide, pero disminuía el volumen considerablemente en cada sesión (con intervalos de 1 mes).

Hace 2 meses, después de la infiltración con 5-FU, usó nitrógeno (gas frío). Esto provocó una ampolla aun más grande, pero también fue más efectivo. Tuve mi última sesión hace un mes y tengo una costra grande que, al caer, dejará piel nueva en el lugar. Este tratamiento lo complemento con láminas de silicona, ya que no me puedo poner algo ahí que presione sin que moleste. Las láminas me funcionan muy bien. Además, lo más importante, es que está plano 🙂

Este tratamiento es realmente doloroso. Yo tengo piercings y tatuajes, pero no había sentido antes tanto dolor como con este tratamiento. Incluso algunas veces hasta con anestesia sentía dolor, pero juro que vale la pena. Nunca antes pensé que esto podría llegar a estar así de plano. Yo creo que está prácticamente a punto de desaparecer jiji.

Por lo tanto, ¡Ánimo a quienes están en tratamiento!

Yo me aguanté un año con esto. El medicamento igual es fuerte y yo tengo la piel sensible (hasta los parches me dejan pigmentado), pero con el tiempo también se va.

Fotografías del procedimiento

Eso es todo por ahora. Confío que con el tiempo y las láminas de silicona bajará el volumen que queda y mejorará su color 🥰💕

Esta última foto la tomé al momento de escribir mi historia, el 15 de febrero de 2023:

Cierre y palabras propias

¡Espero que les haya gustado esta historia tanto como a mí! Me emociona enormemente conocer el paso a paso de estos tratamientos. Me mantendré en contacto con ella para ir actualizando su caso.

En el post de Instagram subiré algunos detalles y conclusiones que se pueden obtener de su caso. Finalmente, quiero darle muchísimas gracias a Fran por facilitarme las fotografías y contarme sobre su experiencia con detalle, espero de todo corazón que su tratamiento siga avanzando de manera tan positiva como hasta ahora.

Muchas gracias también a ti por leer y llegar hasta aquí 🙂

Si llegaste buscando especialistas que realicen tratamientos en cicatrizaciones queloides y/o hipertróficas, puedes revisar nuestra Lista de Especialistas. Intentamos mantenerla lo más actualizada posible, por lo que si tienes algún dato cuéntanos tu historia 🙂

Con amor,

Isi